La reciente aprobación de una nueva ley por parte del Parlamento italiano generó preocupación en muchas familias argentinas con ascendencia italiana. Esta normativa, que transforma en ley un decreto previo, limita el acceso a la ciudadanía italiana solo a hijos y nietos de personas nacidas en Italia y que hayan mantenido su ciudadanía hasta su fallecimiento.
En términos simples: si tu familiar italiano se naturalizó argentino antes de que naciera su hijo, es probable que ahora estés fuera del camino administrativo tradicional. Pero no todo está perdido.
Virginia Pregot, socia gerente de Ciudadanía Italiana por Derecho, aclaró en FM Cristal que la ley no cierra las puertas definitivamente. “Hay dos caminos posibles”, afirmó.
Vía administrativa: sigue disponible para hijos y nietos directos de italianos “puros” (es decir, que nacieron en Italia y no perdieron su ciudadanía).
Vía judicial: sigue vigente para todos los demás. Aunque el camino es más complejo, es perfectamente válido y aún se puede iniciar.
“Todos van a poder. Por un camino o por el otro, todos van a poder”, remarcó Virginia. El mensaje central de la entrevista es claro: la ciudadanía italiana no está perdida, aunque los caminos hayan cambiado.
Quienes no encajen en el nuevo esquema administrativo todavía pueden iniciar un proceso judicial. Y cuanto antes se actúe, mejor. Lo importante es informarse, evaluar las vías disponibles y accionar con estrategia.